Es una prueba realizada cuando existe una alteración en la emisión de actividad eléctrica de los nervios a los grupos musculares para su adecuado funcionamiento en cuanto a fuerza, movimiento y la realización normal de las actividades diarias.
Para la realización del examen se colocan parches con electrodos que se adhieren a la piel de los músculos de la cara, brazos o piernas o zona afectada. Los parches emiten impulsos eléctricos que estimulan los nervios identificando las anormalidades de la conducción de energía al músculo o grupos musculares.
Los daños de los nervios suelen deberse a traumatismos (golpes o heridas), enfermedades por virus, bacterias u hongos, enfermedades autoinmunitarias, consumo de alcohol, diabetes mal controlada, hipertensión mal controlada, insuficiencia renal.
Algunas indicaciones para la realización del estudio
- Miopatía
- Síndrome de Lambert-Eaton
- Miastenia grave
- Síndrome del túnel carpiano
- Síndrome del túnel tarsal
- Neuropatía diabética
- Parálisis de Bell
- Síndrome de Guillain-Barré
- Plexopatía braquial
- Disminución de la sensibilidad
- Incremento del dolor con sensaciones no dolorosas